Centro Maestro Alonso, 04/10/07
A mediados del siglo XIX, para evitar el hacinamiento de la población, fue necesario que Madrid creciera por el exterior. Este ensanche fue realizado por Carlos María de Castro, que programaba la dilatación de la capital hacia el norte, el este y el oeste, tras el obligado derribo de sus murallas.
La influencia del marqués de Salamanca en el desarrollo del plan es indiscutible ya que los terrenos adquiridos por el marqués llegaron casi a las 100 hectáreas de tierras áridas. Éstas, destinadas a la construcción de viviendas y hoteles aislados, estaban delimitadas por : Goya, Serrano, Claudio Coello, Villanueva y Jorge Juan.
Las primeras manzanas (nº 208 y 209) son las únicas que conservan el “Plan Castro”. Estas son llevadas a cabo por el arquitecto Cristóbal Lecumberri. Tienen sólo 3 plantas más la baja y patios centrales de 8 m² y otros más pequeños para luces y ventilación.
La influencia del marqués de Salamanca en el desarrollo del plan es indiscutible ya que los terrenos adquiridos por el marqués llegaron casi a las 100 hectáreas de tierras áridas. Éstas, destinadas a la construcción de viviendas y hoteles aislados, estaban delimitadas por : Goya, Serrano, Claudio Coello, Villanueva y Jorge Juan.
Las primeras manzanas (nº 208 y 209) son las únicas que conservan el “Plan Castro”. Estas son llevadas a cabo por el arquitecto Cristóbal Lecumberri. Tienen sólo 3 plantas más la baja y patios centrales de 8 m² y otros más pequeños para luces y ventilación.
Lecumberri debido a las deficiencias de sus edificios les prende fuego y llama a Elías Royen (arquitecto-restaurador) para que participe en la construcción del barrio.
Salamanca quiere intervenir en las manzanas 208 y 209 y pide licencia para 13 casas en 1863.Se le conceden además 11 licencias más en las manzanas siguientes.
Aunque Salamanca es ascendido socialmente al ser nombrado Marqués de Salamanca y Conde de los Llanos, sufre problemas económicos. Para recuperarse de su declive, quiere volver a edificar para alquilar y llama a Luís Ruiz Álvarez (maestro de obra).Estas nuevas viviendas se dividen en: sótano, planta baja que tiene tiendas, recepción y dos viviendas (una da a la vía pública y la otra al jardín interior) y pisos. Lecumberri y Salamanca reservan un paso para carruaje.
Al no haber ascensor se divide los edificios según las clases sociales, ocupando las plantas inferiores las clases acomodadas. La ornamentación de los huecos también varía dependiendo de la condición social aunque todos están balconados. Se resaltan las líneas de imposta, los aleros son de madera y las cubiertas de teja.
Fueron éstas las primeras casas de Madrid en tener luz eléctrica, chimenea francesa en las habitaciones, desagües rápidos...Estas viviendas eran mejores que las del casco histórico y fueron residencia de célebres figuras como Bécquer, los hermanos Álvarez Quintero (escritores), Castelar, Pi y Margal, Dato (políticos), Arturo Mérida (arquitecto),etc.
Salamanca financia el alcantarillado de la Castellana a cambio de modificar el “Plan Castro”.Los hoteles aislados se comenzaron a construir en 1870. Lecumberri y Ruiz Álvarez finalizan la obra con dos categorías de hoteles que tienen tres niveles, semisótano y cochera. Actualmente sólo pervive uno en la calle Villanueva.
Hay alcantarillado y servicios de agua en las calles, aparecen los ascensores, desapareciendo así la jerarquía social vertical de los edificios y también se realizan construcciones auxiliares para distintos usos como cocheras, etc.
A principios del siglo XX la parte norte se dedica a palacetes. Aparece el tranvía en calle Serrano y complejos sociales como colegios, fundaciones, conventos y hospitales .En 1926 ya aparecen las tiendas de lujo en Serrano con gran actividad comercial.
Este barrio conserva la personalidad de Salamanca, siendo una de las zonas residenciales más prestigiosas del continente europeo.
Salamanca quiere intervenir en las manzanas 208 y 209 y pide licencia para 13 casas en 1863.Se le conceden además 11 licencias más en las manzanas siguientes.
Aunque Salamanca es ascendido socialmente al ser nombrado Marqués de Salamanca y Conde de los Llanos, sufre problemas económicos. Para recuperarse de su declive, quiere volver a edificar para alquilar y llama a Luís Ruiz Álvarez (maestro de obra).Estas nuevas viviendas se dividen en: sótano, planta baja que tiene tiendas, recepción y dos viviendas (una da a la vía pública y la otra al jardín interior) y pisos. Lecumberri y Salamanca reservan un paso para carruaje.
Al no haber ascensor se divide los edificios según las clases sociales, ocupando las plantas inferiores las clases acomodadas. La ornamentación de los huecos también varía dependiendo de la condición social aunque todos están balconados. Se resaltan las líneas de imposta, los aleros son de madera y las cubiertas de teja.
Fueron éstas las primeras casas de Madrid en tener luz eléctrica, chimenea francesa en las habitaciones, desagües rápidos...Estas viviendas eran mejores que las del casco histórico y fueron residencia de célebres figuras como Bécquer, los hermanos Álvarez Quintero (escritores), Castelar, Pi y Margal, Dato (políticos), Arturo Mérida (arquitecto),etc.
Salamanca financia el alcantarillado de la Castellana a cambio de modificar el “Plan Castro”.Los hoteles aislados se comenzaron a construir en 1870. Lecumberri y Ruiz Álvarez finalizan la obra con dos categorías de hoteles que tienen tres niveles, semisótano y cochera. Actualmente sólo pervive uno en la calle Villanueva.
Hay alcantarillado y servicios de agua en las calles, aparecen los ascensores, desapareciendo así la jerarquía social vertical de los edificios y también se realizan construcciones auxiliares para distintos usos como cocheras, etc.
A principios del siglo XX la parte norte se dedica a palacetes. Aparece el tranvía en calle Serrano y complejos sociales como colegios, fundaciones, conventos y hospitales .En 1926 ya aparecen las tiendas de lujo en Serrano con gran actividad comercial.
Este barrio conserva la personalidad de Salamanca, siendo una de las zonas residenciales más prestigiosas del continente europeo.
OPINIÓN PERSONAL
La conferencia resultó amena debido a la proyección de fotografías, de documentos gráficos históricos que muestran el progresivo crecimiento de la ciudad, y a las anécdotas introducidas por el conferenciante. Sin embargo, creo que debería haber profundizado más en los aspectos arquitectónicos del barrio y no tanto en su faceta histórica.
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